Cuidar la alimentación durante el embarazo es una parte fundamental del proceso para que el bebé crezca sano y se desarrolle con normalidad. Por ello, además de las indicaciones de los especialistas, queremos ofrecerte un listado de los alimentos que debe tomar una mujer gestante y cuáles debe evitar durante estos 9 meses. ¡Sigue leyendo!

Los nutrientes que no pueden faltar en el embarazo: una alimentación saludable

Aunque la dieta debe ser igual de equilibrada y variada que la del resto, durante el embarazo también es importante incluir un aporte especial de nutrientes. A continuación, te mostramos algunos de los que no pueden faltar:

El ácido fólico

Es esencial para la formación adecuada del tubo neural del feto y puede reducir el riesgo de defectos congénitos. Se recomienda que las mujeres embarazadas consuman entre 600-800 microgramos de ácido fólico al día.

 El calcio

Los productos lácteos son la mejor fuente de calcio. Y aunque los más habituales y conocidos pueden ser la leche, los quesos o los yogures, el calcio también se encuentra en otros alimentos como el brócoli, la col rizada e incluso algunas frutas.

La vitamina D

Este nutriente es fundamental para contribuir a una mejor absorción del calcio y el desarrollo óseo del feto. Se recomienda que las mujeres embarazadas consuman al menos 600-800 unidades internacionales (UI) de vitamina D al día.

Las proteínas

Son esenciales para el crecimiento y desarrollo de los tejidos del feto. Los especialistas aconsejan que las mujeres embarazadas consuman al menos 70 gramos de proteína al día.

El hierro

Es importante para la producción de glóbulos rojos y para prevenir la anemia de la propia madre y del feto. El consumo diario para mujeres embarazadas estaría en torno a los 27 miligramos de hierro al día.

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Alimentos prohibidos en el embarazo

El proceso de gestación es un momento delicado, tanto para la mujer como para el feto. En esta etapa, también hay que hacer algunos cambios en la alimentación, evitando ciertos productos que puedan contener microorganismos perjudiciales para el bebé.

  • Leche cruda y lácteos sin pasteurizar. Aunque los lácteos son una fuente importante de calcio, es importante desterrar por completo aquellos que no han sido pasteurizados, ya que el riesgo de portar bacterias como la Salmonella, E. coli, Listeria, Campylobacter, es altísimo.
  • Pescado crudo o ahumado. Como sucede con otro muchos alimentos, los productos en crudo tienen grandes probabilidades de contener diversos parásitos y bacterias.
  • El marisco crudo, al igual que otro tipo de pescados no cocinados, supone un alto riesgo de intoxicación por anisakis. Por ejemplo, deben evitarse especialmente, las ostras, las almejas, los mejillones, las vieiras, etc. E incluso, comer las cabezas de las gambas, ya que contienen un alto contenido en cadmio.
  • Atún rojo y otros pescados con niveles altos de mercurio. Como pueden ser el tiburón, el pez espada, la caballa rey o el pez sierra, entre otros.
  • También son productos con un alto riesgo de contaminación por listeria. Por ello, es importante evitar la mortadela, el salami, el salchichón…
  • Huevos y carnes crudas o poco hechas. Este tipo de alimentos, cuando no están bien cocinados, puede contener bacterias como la salmonella, la E. coli y la listeria, que pueden causar infecciones graves en la madre y el feto.
  • Los patés implican un alto riesgo de listerioris y, aunque pueden consumirse con moderación, no se deben tomar sin verificar que están pasteurizados.
  • Verduras sin lavar. Aunque las verduras son parte esencial de una dieta saludable, si están mal lavadas pueden generar contaminación por toxoplasmosis.
  • Café. El consumo excesivo de cafeína puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo y de parto prematuro. Por ello, se recomienda limitar su ingesta a menos de 200 miligramos por día.
  • Por supuesto, desde la primera noticia de embarazo, el alcohol debe desterrarse por completo. Entre otros problemas, puede terminar provocando daños cerebrales graves en el feto.

¿Es seguro comer pescado para las embarazadas?

Por supuesto que sí, aunque con excepciones. El pescado es una excelente fuente de proteínas, ácidos grasos omega-3 y otros nutrientes que son especialmente beneficiosos para la salud. Sin embargo, algunos pescados tienen un alto contenido de mercurio y otros contaminantes, por lo que es importante limitar su consumo y elegir pescados de menor riesgo. También, como hemos comentado anteriormente, es necesario asegurarse de que el pescado esté bien cocido para evitar la exposición a bacterias y otros microorganismos que pueden ser perjudiciales durante la gestación.

¿Cuándo deben evitarse las carnes rojas y los embutidos?

El consumo de carnes rojas y embutidos supone un significativo riesgo de infección con la bacteria Listeria monocytogenes, que puede causar graves problemas de salud en el feto.

  • Las carnes rojas, como la de vaca, cerdo y cordero, se deben cocinar completamente para reducir el riesgo de infección por bacterias. Se recomienda que se cocine a una temperatura interna de al menos 71°C y que se eviten los jugos rosados.
  • Por otro lado, los embutidos y fiambres crudos o poco cocidos, como el jamón, el salami, la mortadela y el chorizo, también deben evitarse debido al riesgo de infección con Listeria.

En estos casos, y siempre que surjan dudas, es fundamental consultar con el médico de cabecera o un especialista en nutrición para evitar cualquier tipo de infección o contaminación.