La depresión es un trastorno del estado de ánimo cuya característica principal es la apatía y una profunda sensación de tristeza. Se puede prolongar durante semanas, meses e, incluso en casos extremos, años, y afecta a varios aspectos de la vida. Suele afectar más a mujeres que a hombres, y, como cualquier otro factor psicológico, también influye en el proceso de gestación y en la fertilidad.

Puede surgir en cualquier etapa de la vida, y en cualquiera de ellas es algo muy duro, pero más durante el embarazo, ya que todo el mundo espera que estés feliz por estar esperando un bebé. Algunas presentan síntomas durante el embarazo, y otras, después. Muchas piensan que son cambios de ánimo normales durante el embarazo, pero no siempre es así, por eso es importante que el médico esté al tanto de tu estado de salud, tanto físico como emocional, en todo momento, para que pueda ayudarte.

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En cualquier circunstancia, para que la depresión desaparezca, es necesario recibir tratamiento psicoterapéutico. A algunas personas no les parece adecuado tomar medicamentos durante el embarazo. Pero por eso es necesario que el médico esté al corriente de tu estado anímico, que es quien sopesará los pros y contras de tomar medicación. Es necesario seguir las pautas que indique el médico ya que, especialmente en ese estado, puede haber riesgos tanto para ti como para el bebé.

¿Cómo puedo llevar un embarazo saludable si padezco o he padecido depresión?

Con depresión es complicado sobrellevar los cambios físicos, emocionales y hormonales que el embarazo trae consigo. Por eso, lo mejor es hablar con el médico sobre lo que vas sintiendo.

Pero lo más importante que debes hacer es ponerte por encima de todo. Tu salud y la de tu bebé son lo más importante. Así que, tómate las cosas con calma, delega las obligaciones en otras personas y haz cosas que te hagan sentir bien.

Cuándo es conveniente pedir ayuda

A veces es complicado diferenciar cuándo se trata de simple tristeza o algo más grave. Cuando te sientas incapaz de hacer tareas diarias, tengas pensamientos obsesivos (rumiaciones), sensación de vacío y de soledad, llanto constante, dificultad para concentrarte, sensación de inutilidad…, es hora de acudir a un profesional.

Un pequeño porcentaje de mujeres que va a tener un hijo presenta síntomas depresivos durante el embarazo que pueden derivar en catastróficas consecuencias. Por ello, en psicología perinatal se disponen de instrumentos psicométricos específicos para la detección de depresión durante el embarazo.

Depresión posparto: cómo identificar la depresión después del parto

Puede que te sientas triste después de tener al bebé, y es una emoción normal, dentro de lo que cabe, ya que esas emociones están vinculadas a los cambios hormonales específicos que se producen tras dar a luz. Pero, si se prolonga demasiado en el tiempo, excediendo el par de semanas, entonces tal vez no sea algo tan sencillo, quizá se trate de una depresión posparto. Por eso es fundamental acudir al especialista para buscar ayuda.

En algunas ocasiones, esto puede degenerar en psicosis puerperal, produciendo delirios o alucinaciones, por eso es fundamental cuidar la salud mental durante el periodo de gestación. En España se dan unos 400 casos al año, y algunos de ellos pueden conducir al suicidio o al infanticidio.

En FIV4 disponemos de una Unidad de Apoyo Psicológico con profesionales que te ayudarán durante los tratamientos a minimizar el estrés y poseer un mayor control emocional. Todo ello con el fin de mejorar la calidad de vida tanto tuya como del bebé.